tenían mas que un vestuario de brin, no siendo posible vestirlos
de pafio en donde no daban los recursos lo suficiente para el
rancho; que al preparar el jencral Blanco un movimiento para
desalojar al enemigo de Poxi i de Puquina, pidió al Gobierno
provisional que aprontara las raciones i bagajes necesarios, i no
consiguió mas que promesas, i llegado el dia de marchar, 11no
hubo ni el pan suficiente para una comida de la tropa.11
A
los que han hecho al jenera] Blanco el cargo de no haber–
se retirado de Arequipa ántes que Santa Cruz se presentase en
Paucarpata con un respetable ejército, contesta Irizarri que
Blanco pensó, en efecto, en hacer esta retirada i para ello pidió
al Gobierno provisional que le aprestase raciones en Uchuma–
yo, en Vitor
i
en Siguas, i se juntasen en Arequipa las mulas
i burros necesarios para verificar la marcha; que la negociacion
de Sabandía i el armisticio de cuatro dias concertado en Mo–
llevaya tuvieron el doble objeto de ver si se podía tratar con el
enemigo i de dar tiempo al prefecto de Arequipa para reunir
los medios de hacer aquella retirada. Pero despues que volvió
de su mision, concluido el término del armisticio, nada se habia
conseguido para mover el ejército.
Al cargo de no haber exijido el jeneral Blanco por la fuerza
los auxilios que necesitaba, contesta Irizarri que semejante me–
dida habría sido contraria a las instrucciones del Gobierno de
Chile, e inútil aqemás, porque no era posible hallar tales auxi–
lios. Rechaza Irizarri igualmente el cargo de que Blanco no hu–
biese prestado el auxilio de la fuerza chilena para la requisicion
de las con tribucioncs; sobre lo cual observa que para este efecto
cualquier piquete de policía habria sido bastante i no convenía
soltar la tropa en pequefias partidas, porque e(}to habría facili–
tado su desercion, habría desmoralizado al ejército i hécholo
odioso al pueblo. De aquí toma pié para agregar que el Go–
bierno provisional no tenia base alguna en la opinion; que no
era mas que una carga para el ejército de Chile; que éste no
tenia, ni podía contar con mas auxilios que los que él mismo
se proporcionara, i que siendo insuficiente por la fuerza de que
se componía, upara hacer la conquista del Perú i de Bolivia, se
cometió el error ma" grande posible en haberle enviado a com–
prometer los intereses de Chile, fiándose solo en unos cálculos