LIBROS & ARTES
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nes sobre el protagonista central de
la vida social y política de las déca-
das 50 y 60. Con diferentes diná-
micas, ritmos y formas de lucha y
negociación, los movimientos cam-
pesinos mostraron una enorme ca-
pacidad de reestructuración de la
sociedad y de la política. Debilitó
la gran propiedad en la sierra, mul-
tiplicó la pequeña propiedad e im-
pulsó la salida del gamonalismo de
la coalición social y política que or-
ganizaba y sostenía al Estado
oligárquico. En el mismo año, Po-
pulibros, con un gran sentido de
oportunidad, sacó estas crónicas del
mundo de lo efímero, que es el pe-
riodismo, y las colocó en el reino
de lo eterno, propio de los buenos
libros.
Cuzco, tierra y muerte
es el
título vendedor del libro. En 1975,
publica
Huillca, habla un campesi-
no peruano,
con el que obtiene el
premio Casa de las Américas. A
fines de los 80 emprende la elabo-
ración de una obra de largo alien-
to,
Hacia la tercera mitad, Perú XVI-
XX, Ensayos de relectura herética,
que se publica recién en 1996. Tra-
ta de la historia, pero no es un libro
de historia, sino una reflexión so-
bre ella utilizando las teorías y las
herramientas de la sociología. Neira
estudió historia bajo las orientacio-
nes de Raúl Porras, de quien fue uno
de sus destacados discípulos. Lue-
go hizo el doctorado en Sociología
en la Universidad de París (Ecole
Pratique des Hautes Etudes). Fue
integrante de la famosa «aplanado-
ra» del Sinamos en los tiempos de
Velasco, director de
Correo
entre
1974 y 1976 y profesor de la
Université Francaise du Pacifique
en Tahiti.
4.
Una nueva historia
Un libro que abrió las puertas a
la década del 80 fue
Nueva histo-
ria general del Perú
, que tuvo va-
rias ediciones en la década del 80 y
que fue leído con mucho interés no
sólo en el mundo universitario sino
también en los colegios secunda-
rios, especialmente en los de las cla-
ses medias y altas. El libro presenta
una visión general del Perú a través
de diez artículos escritos por espe-
cialistas e investigadores sobre las
diversas épocas de la historia perua-
na. Sin trabas eruditas, el libro fue
pensado por los editores de Mosca
Azul para un público amplio sin
que por ello pierda el rigor científi-
co necesario. Se trataba de presen-
tar los resultados de investigacio-
nes innovadores sobre la historia del
Perú, superando las perspectivas
metodológicas y políticas conserva-
doras. Seis de los autores eran his-
toriadores de profesión (Luis
Guillermo Lumbreras, Carlos
Araníbar, Manuel Burga, Alberto
Flores Galindo, Heraclio Bonilla y
Waldemar Espinoza Soriano), tres
eran sociólogos (Julio Cotler, Ernes-
to Yepes del Castillo y Sinesio
López) y uno era filósofo (José Ig-
nacio López Soria). La formación
de los historiadores provenía de dos
fuentes, independientemente si es-
tudiaron en otras universidades na-
cionales y extranjeras. Algunos fue-
ron discípulos de Raúl Porras
Barrenechea (Araníbar, Lumbreras,
Espinoza) y otros fueron formados
por los historiadores de los Annales
franceses (Bonilla, Burga y Flores
Galindo). Los sociólogos eran
egresados de la Universidad Nacio-
nal Mayor de San Marcos (de et-
nología en el caso de Cotler y so-
ciología en los caso de Yepes y
López) con estudios de doctorado
en Europa (Yepes en la Universi-
dad de Manchester, Cotler en la
Universidad de Burdeos y López en
la Universidad de París). La mayo-
ría de los autores tenía una orienta-
ción marxista y casi todos, sobre
todo los sociólogos, habían recibi-
do una influencia decisiva de los en-
foques dependientistas latinoame-
ricanos, especialmente de la co-
rriente encabezada por Fernando
Henrique Cardoso.
El libro tiene, sin duda, eviden-
tes limitaciones, algunas de ellas
conscientemente asumidas, tales
como la ausencia de citas y refe-
rencias bibliográficas y la negativa
a un tratamiento extenso de los te-
mas que trata. Pero presenta al mis-
mo tiempo algunas virtudes que lo
hacen atractivo a los lectores. En
primer lugar, la argumentación bre-
ve y concisa de los artículos, que
permite condensar en un solo tomo
de 263 páginas toda o casi toda la
historia del Perú. En segundo lugar,
la presentación de ideas innova-
doras y frescas que ofrecen una vi-
sión de la historia peruana, diferen-
te a la tradicional. En tercer lugar,
el enfoque predominante de acto-
res colectivos, instituciones, proce-
sos y estructuras en el análisis his-
tórico, dejando de lado la privile-
giada atención a los personajes y los
hechos de la historia tradicional.
Este rasgo emparenta la historia con
la sociología histórica clásica
(Montesquieu y Tocqueville) y
moderna (Barrington Moore,
Theda Sckócpol y otros).
Lumbreras es uno de los princi-
pales investigadores en el campo de
la Arqueología. Ha publicado va-
rios libros de su especialidad y ha
formado a varias generaciones de
arqueólogos en la UNMSM. Su ar-
tículo, El Perú Prehispánico, es una
visión de síntesis de esa época des-
de que el hombre llegó a sus terri-
torios hace más o menos veinte mil
años hasta la llegada de los españo-
les. Resume sus propias investiga-
ciones y las de varios investigado-
res nacionales y extranjeros sobre
la etapa que presenta en siete pe-
ríodos: Los recolectores de alimen-
tos, de la economía recolectora a
la producción de alimentos, del
Ayllu al Estado, los Estados Teo-
cráticos, el imperio Huari, los esta-
dos regionales tardíos y el Imperio
de los Incas. Influido por la pers-
pectiva de Gordon Childe especial-
mente, pero abierto a los grandes y
plurales descubrimientos de la ar-
queología y sobre todo conocedor
profundo y sistemático de los res-
tos y huellas dejadas por los hom-
bres y mujeres en nuestro territo-
rio, Lumbreras ha logrado analizar
las características económicas, so-
ciales y políticas de las diversas eta-
pas de la historia prehispánica, exa-
minar sus desafíos, tensiones y con-
tradicciones, estudiar sus cam-
bios y establecer los linderos más o
menos precisos de los distintos pe-
ríodos que ella comprende.
Carlos Araníbar fue uno de los
discípulos predilectos de Porras y
uno de sus colaboradores más cer-
canos. Pese a que tiene mucho que
enseñar gracias a su erudición,
Araníbar ha sido y es, sin embargo,
renuente a la enseñanza universita-
ria. Esa renuencia obedece proba-
blemente a una mezcla de timidez,
modestia y exigencia académica. Es
una lástima que varias generacio-
nes de estudiantes de San Marcos
no hayan podido gozar de sus en-
señanzas y de su erudición históri-
ca. Carlos Araníbar y Pablo Mace-
ra son, sin duda, los dos más bri-
llantes historiadores discípulos de
Porras que, pese a su escasa obra
publicada, brillan con luz propia.
Los integrantes de su generación es-
peraban de ellos una obra orgánica
mayor. Es una deuda intelectual que
ellos todavía están a tiempo de sal-
dar. Todos los que admiramos su
inteligencia les agradeceremos
siempre si llegan a cancelar esa deu-
da. Araníbar escribe El principio de
la dominación (1531-1580) que
se despliega “entre los dos nombres
famosos: Pizarro, el soldado,
Toledo, el burócrata. Principio y
término de la implantación, por
violencia y ajustes, de una situación
colonial que nacía para durar siglos”.
Araníbar no sólo es un erudito, un
humanista, sino que posee una plu-
ma admirable. Su estilo es ameno,
directo y preciso al mismo tiempo.
Su análisis se nutre de las contribu-
ciones de la etnohistoria desarrolla-
da por JohnMurra, John Rowe, Juan