6r
en
los
mismos Colegios destinados á Seminarios las haya
á
propo–
sito; pero con la precisa caliJa.d de darles enrrada
y
salida inde–
pendienre , permitiendo la comunicacion interior precisa para los
Seminaiistas ,
la qua! ahorrará
á
los Seminarios
el
gasto de sala–
·rios de Maestros , y la mayor concurrencia de discípulos excitará
la
emulacion entre los de dentro ,
y
Jos de fuera. Pero esto debe
ser sin que el
régimen de tales Escuelas menores dependa del Se–
minario, n'i este de aquellas, porque uno y orro deben tener sus
.Direétores distintos , y separados. Por esta razon como estableci–
mientos puramente seculares vine , á Consulta de mi Consejo en el
Extraordinario , en aplicar á estos Magisterios las dotaciones que
con el mismo fin disfrutaban los
Reg ulares de In Compafíia
,
man-
ando se proveyesen á oposicion en Maestros seculares , en cuyo
;isunto se expidió.· la
Pro~·hion
de mi Consejo de cinco de Oél:ubre
tlel año próxímo pasado , que se esrá execurando.
XVIII
Para los .Estudios Eclesiásticos interiores del Seminario,
cuya enseñanza
y
perfeccion es mas propia del Clero, deberá ar–
reglarse un método que sirva de norma en las erecciones que se
hagan ,
y
á cuyo fin en el concepto de mi resolucion , á consulta
de mi Consejo , en el Extraordinario de veinte
y
nueve de Enero
del prnpio año pasado , sobre que solamente se há de enseñar la
Q.oél:rina pura de la Iglesia ,
siguiendo la de
San Agustin
;
y
Santo
Tomas
,
mando al mismo Consejo haga prohibir todos los Comen–
tarios , en que direél:a
ó
indireél:amente se oygan
máx~mas
contra–
rias , ó se lisongeen las passiones con Fetexto de probabilidades ,
ó
doéhinas ·nuevas , agenas de las Sagradas letras ,
y
mente de los
Padres
y
Concilios
de
la Iglesia ,
y
encargue á dos Prelados , de
Jos qne tienen a ienro
y
,·oz
en
él,
estiendan un Plan completo
de Ja distribuc ion
y
mé1odo de estos E studios Eclesiásticos, para
c¡ u
hac iéndose presente en dicho ·mi Consejo ,
y
oyendo
á
mis
Fiscales ; . e pt.b ique
y
sirva de nor111a rerretua •
y
autoriza–
da
para · unos estiblecimientos de tanta importancia ;
y
que á este
fin ,
sin
adortar sist•
n
1
a~
particulares , que formen st>éla y espíri–
tu de scuela , se reduzcan á un justo límite las sutilezas escolásti–
cas, destern.ndo el laxo modo de opinar en lo moral .,
y
cimen–
tando á lo>
jó•
enes en la inteligencia de la Sagrada Biblia , cono–
cimiento del dng1na , y de los errot"es condenados , de las reglas
Ec'esiásticas de la gerar.quía , y disciplina , y en los ritos , con la
progresion de
la
Liturgía ,
y
ua resúmea de la Historia Edesiás-