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toda de milicianos de los pueblos fronterizos a la Arjentina, a
las órdenes del jeneral don Felipe Brawn, para rechazar las
fuerzas de Hercdia.
Brawn e tableció su cuartel jeneral en Tupiza, i desde allí
comunicaba al jefe de estado mayor jeneral de lo ejércitos de
la Confederacion Perú-boliviana, con fecha 3
I
de Agosto, la
noticia de haberse sublevado dos dias ántes los pueblos arjenti–
nos de la Puna i de los valles de Santa Victoria e Iruya, pren–
diendo a su gobe1 nador i a los jefes
i
oficiales que se ocupaban
en di. ciplinar en aquellos lugarc un continjentc como de mil
soldci.dos que debian operar contra Bolivia. Despue de este su–
ceso, que el jeneral Ileredia atribuyó a lo
ajente
de Santa
Cruz, la division boliviana de Brawn penetró en la provincia de
Salta i acampó en Yavi, donde el jeneral proclamó (6 de Se–
tiembre) a los pueblos de dicha provincia
i
a los de
J
ujui, de
Tucuman
i
de Catamarca, llamándolos, a imitacion de Heredia,
a ligarse con los boliviano. para derrocar el omino o i tiránico
gobierno del jeneral Ro a . El
13
de Setiembre
e amotinaba
en la ciudad de Salta el batallan Cazadore de la Libertad, i
habiendo intentado tümar el cuartel de
Coraceros
de
la
llluerte,
fué
rechazado;
i
requerido luego a la obediencia por el coronel
don Evaristo
l
riburu, se declaró rendido, siendo luego
fu
ilados
los principales cabecilla . Atribuyóse tambien e te incidente a
maniobras del Gobierno de Bolivia.
El mismo dia
13
de Setiembre dos columnas avanzadas res–
pectivamente de los dos campo contrarios, e batían en la villa
de H umahuaca, sin resultado apreciable para la campaña, pues
ámbos belijerantes se atribuyeron a u vez la victoria. Santa
Cruz dijo entónces al ejército del sur: 11La campaña que habeis
emprendido, no será ménos gloriosa que la. anteriore . La ha–
beis comenzado bizarramente i os hab-..is mostrado en Huma–
huaca dignos de vue tras pa. ada · glorias.11 I dirijiéndose a los
pueblos arjentinos en una proclama de
26
de Setiembre, les di–
jo:
11
El gobierno de Bolivia no quiere engranrlecer e a vuestra
costa: ...... qui re veros felic c ·, al abrigo de las persecuciones
i
saqueoc:;, i que n
seai s los in ":>trumento., de las pa innes de los
Rosas i Heredias ..... . Nada tcnei. que temer: el ej ército que
vereis en vuestro territorio, va a protcjer vuestros derechos, ha-