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ORESTES
bi
1.uLi..o
dad de este aserto, no obstante ser la pro–
ducci6n de alimentos la base de l:a f,ortu–
na
nacion.al.Facil sera deducir lo que
.acontece en otro.s paises menos ricos que
el nuestrio. Es probable tambien que in–
tervenga en este factor la ignorancia to–
tal de
l.osprincipios fundamentales de la
alimentaci6n~ ;
y:a que se ha demostrado
que un· individuo p_uede hartarse a di;ario
y
vivir e·n desnutrici6n. No basta comer,
es necesario conocer l·o minimun que es
indispensable ingerir para evitar el desme–
recimiento de nue.stro cuerpo. N,o s6·1o la
cantidad es lo que interesa saber, sino la
calidad de lo que se ingiere; y sobre este
punt o el puebl
1
0
ignor:a todo, c.omo que .na–
die se ·Ocup6 hasta ahor.a de en:senarle
~o
que constituye el interes maxim·o de
I.a
vi–
da: la manera de iprolongarla
y
de hacer
rendir mas f ructlferamente el trabaj.o dia–
rio.
No es posible ac,onsejar nada \a un pue–
bl·o en materia de alimentaci6n sin oo·no–
cer sus gustos, sus tendencias
y
la pro–
ducci6n de sus alimentos. Se debe comer
lo que agrada
y
en este ·sentido lo que ·pa–
ra
un.osresulta exqui-sito para otros .apa–
rece co·m·o intoler.able. La ·alimentaci6n
forma parte de la cultura individual: no
com"en lo mi·sm,o los individuos cultos que
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