ALl\IA
LATI
A
7
sin conseguirlo. B o nitas estamos
11osotr:1s
pa nt
respo nder. Como qne
va a haber «segundan este año en
S::in Pedro y mamá está empeñ a da
en que vuelva al colegio. Y así a
muchas compañeras mías. Ustedes
que están atacados de una «san pe–
clrofohia,, feroz, poclríHn abrir m:'ís
bien una
enquete
sobre si debii:1 ha–
ber este año segunda o no
VHya
que sería interesq,nte la
enquPte.
Y
cuántas respuestas recibirían sin ce–
sar, princiµiando por la mía. Por–
que nosotras nos sostenemos
y
es–
taremos erre que e 1·re en no acce–
der .
Pero nó; se les ocurre en cambio,
preguntar si ALMA LATINA tiene in –
teres para las p0ll a s.
¡Regalones!
Son ustedes corno los l\/Iinistros de
nuestra tierra, que a cada momen–
to solicitan votos ele confianza de
las cámaras sabiendo que cuentan
con elsufragio de la mayoría. El
resultado es seguro y afirma 111{1s
en la silla ministerial. Pues no he–
mos de darles
gusto.
En tanto mi asunto de la segun–
da es
mil
veces más in teresa nte Us ·
tecles deben ahogar porque no se
realice esta nefasta idea. Por todo
el
desbarnjuste de razones que
les
enumero en seg1.,lich1:
Primero, porque interrumpo la
serie de mis hafiosen La Punta, que
es mucho más interesante que las
se ri es del co leg io
y
porque el direc:–
t o r de CARCAJADAS me ha prometl
do · dedicarme un artículo en el pró–
ximo número, que sale
el
mismo día
que se abre el C o legí<,
Segundo, porque Paquito -
Pé-1-
quitn es mi flirt-podía dejarse se–
ducir por otras bellezas del balnea–
rio , lo cual sería un pecado mortal ,
para
rnL
Y t e rcero, por
la
tercera. ¿No com–
prenden ustedes? Pues que la ter–
cera perdería la supremacía. Ya no
serían las ''encantadoras alumnas
de la tercera clase" como dice Nico .
lasito a cada dos líneas, sino las
"adorables pollitas de la segunda".
Y última
y
convincente, q
1
1e Lui–
sita, que es el
flirt
ele uno de l0s Re–
dactores. sería de las condenadas a
la segunda. ¿Están ustedes con–
vencidos?
Abran esa
enquete
y verán el re–
sultado. Por de pronto estoy se–
gura que ]ns argumentos que sal–
dría n echarían abajo a la '·Empre–
sa"
y
mis compañeras, yo, Paquito
y_soh1-et()(lo Luisita, se lo agradece–
ríam, ,s de verdadero corazón. Has–
ta luego, señores Redactores, que
tengo que s, lir a l Parque Colón a
la famosa tanda de siete, donde me -
espera un .. ..... . servidor de ustedes.
Hasta la próxima.
LILÍ.
DOS SEÑORITAS se ofrecen pa–
ra dar lecciones de piano, pin–
tura,
flores
y
toda clase de
labores de mano.
Precios
mui
módicos. --Diri–
girse a
esta Redacción bajo
las iniciales C. R.