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morJl, rcpngn~nte, invcri1imil , y chncurero.
. En los vellos ciempos de Grecia el tearro era el
lil-ifo~ ~n' que' se insrrui3r1 roaos' los "Ciud3dnnos en s~s .in:
-tereses asi civiles co·aí.p policic"ós,Jy xeligios9s, qú~n&'o ya
~eca ía el Impeüo •fürmano; l~s. Desporas que1 -<;uhirjan .d_!=
liranias los recros ae la Repub1 cá, que habian cbrronad o
daban reperidos esp.erac,ulos1lic Cio1ós,;pJra dimaer los ani–
mos de la sirnacion adual de a republ ca. La verda.:l era
._caosa -~ la¡ p,rn~rfF,ÍO,n pis9r.~~jda<i; q\I~ <P¡rJCe~\~or;Augusro' ~
los famp,sQ~ Pa11 ijadq, ,y~ ~athilo;, (ue. la 'necesi–
dad de, ocupar la de lo.~ pueplo~ con los parridos
.que ~e ~lc;v,anp,bJA,,~onr:.ra y, ~ f~gr.irls:. 1 ~ll9 s, para impedir
S!-/e-. no ..~e. pcuP,as~n ~11 ob,je_to,~ ,r;nas 1Í,mportances. En un
govieJno equivg'~o, (y, cµq¡u\c~ri,o,, r.¡C.t;i· el Reynado de un
;T\r,~no son te!lJiblcs las co1rurribres; por que como dicen
.relacion con todo, á rodo pued~n conducir; y un despotico
ha de, temer .ll)uc;ho el . tener Vasa!Jqs, cqya energía pued:r
excitarse por .una conciencia , s3na ,~ ,irreprensible; pero en
un país en que la f ilosofü ha echo grandes prog resos; en
<]Lle las luces se propagan, y en el reynado de un Principe
sabio, bueno, y virtuoso, las costumbres se han de apri:·
ciar, merecen toda COflsideraciog, ·Y se han de.
$u v.s:rdadero esrado: pues siendo ·el rearro ..como
<l lugar en que l e puede apre_nder el gusto, me parece eserr–
cial el que se obligue á seguir las reglas de la cazon, yde:
la moral, que son las mismas del m e.