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firmóla con su Señoría, de que certifico.-Mariano Cataño.–
Manuel Espinarete López." (c)
"Cuzco Junio 5 de 1781.-Respeeto de haberse remitido preso
a este cuartel a Juan Tupa Amaro por Don Pedro Concha, Jus–
ticia Mayor de la Provincia de Quispicanchi, a quien se lo re–
mitió Don Hilario Núñez, escrivase oficio a aquel para que
inmediatamente forme y remita la respectiva
sumari~
de dicho
reo, a fin de poder providenciar lo que contemple oportuno; dan–
do, en caso de no poderlo hacer, la comisión necesaria a
la
persona de ciencia y conciencia, que le pareciere más propor–
cionada.-Manuel Espin&rete López.-(Se despachó el oficio el
mismo día seis.)"
"Cusco y Junio 23 de 1781.-No habiéndose contestado por
el Justicia Mayor de Quispicanchi, ni remitídose
la
sumaria, se–
gún previene el auto antecedente, sin perjuicio de las diligen–
cias que se remitan y los efectos que produzcan, para evitar
más demora, pásese a tomar confesión al reo, y repítase car–
ta a dicho Justicia Mayor, a fin de que cumpla lo mandado.
Y embargue los bienes de dicho Juan.-Manuel Espinarete Ló–
pez.-(Se repitió el oficio hoy día 23)."
"En la ciudad del Cuzco, en veinte y tres días del mes de
Junio de mil setecientos ochenta y uno, compareció ante su Se–
ñoría un hombre que se halla preso en este cuartel, de
qu~en
(c) Después de leer las seis declaraciones anteriores, -queda
la impresión de que los declarantes obedecían a una pauta, ten–
diente ésta a disminuir la culpabilidad de Juan Bautista Túpac
Amaru. Para mejorarle su peligrosa situación, posiblemente Ga–
briel de Avilés, General de los Ejércitos Reales, influyó indi–
rectamente ante los jueces; pues, en sus Memorias juan Bau–
ti sta Túpac Amaru dice: "Fuí sentenciado a seis años de pre–
sidio. Areche quería mi muerte y Avilés se opuso a uno y a
otro". La actitud beni•gna de este General español es algo inex–
plicable,
y
extraña ...
Se nota también que estas declaraciones no se hicieron con
Ja corrección exigida en estos casos. Son obra exclusiva del es–
cribano. En todas ellas se anota que se tomaron en presencia
del Oidor de la Real Audiencia Benito de la Mata Linares, Co–
misionado por el Visitador General José Antonio de Areche, y
que "las firmó su Señoría". Pero, parece que el tal Comisio–
nado no recibió declaración al,guna, porque en el expediente ori–
ginal no aparece, como se indica, la firma de su Señoría. (F.A.L.)