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Mn,.·,
pa1•e
e que la
borrasca
se disipa.
y
que
la pa.z
se1·á
con
el comercio del Callao, con el comercio de Lima, con
el
Go·
bierno, con la casa empre.·aria, con los licitadores y con el
público en general; puesto que los seílores Templcman
y
Berg–
man no lrnn consigna(lo ha¡;;tn, hoy los
$
100,000
que requie–
re como condicion µrévia
y
esencial el supremo deci·eto de 7
de Mayo último. Esto vale tanto como un formal retiro de
dicha, ¿asa: ella r econoció en un tiempo que el Po<ler Ejecu–
tivo no csta,ba facult<:trlo para conceder el priYilegio,
y
es de
c1·ecr (_tue ahora, l'Oconoce otra,s cosas mas .·érias que le ha
puesto (lelante ele
1oR
ojos la.
hrn
<le la. cfü:;cusion; por lo oual
ha tornrtdo el pa,rtido prudente <le retira.rse sin bul1icio, Hin os-
tentacion, sin alharacas, s ino limitán<lose
á
la omision c1e un
requisito sin el cua.l el contrato proyectaflo queda de hecho
sin efecto .
Algo como e to d
ebía espera.rse, desde que el señor Minis–
t
ro rl o Hacienda hn,
deja.do sin resoher las rnpresenta.cione.:
<
J.Uese l o dirigieron, hasta el dia de hoy
(14
ele Julio) en que
se termina el último plazo fijado para el remate. Sin la espli–
cacion que rnsulta del enunciado retiro de
la
casa empresa–
ria., la conducta del seño1· Ministro habria sido inesplicable.
;. Con qué pretesto ha,b1·ia podi1lo salvar Ja enorme responsabi–
lidad que le resultaria. de haber desatendido
á
10s licitadores
que Je pedían c.wlanwiones pa1·a
m~jo1·ar
las propuestas de
Templeman
y
Bergrnan? Ni él mismo, ni na,clie puede saber
en cuantof.> n1ilcs rle Rol es que1laba.n p erjudicados el comer–
cio
y
el ERtado al cenar ]a puerta
á
la libertad ele licitacion ; .
poi·que se ignora las ventajas que pudiera.n haber ido resul–
t<tndo ele
hu;
propue8tas su ccs ivaR hasta la última. Pero tam–
poco se pucrle resistir {L la cvúlcn oia, de que el estorbo ó ]as
nuevas posturas,
ó
lo (111 e es
lo
mi smo,
el
h echo de haber de–
j
a,do en especta ci on
y
pcn <licntes <lo urnt i·esolncion suprern a,
á
Jos qne se a,nunciaban como postores, hc.i de ·naturalizado
la li citacion y viciarlo el conti-ato desde
ab initio.
Los <l efensorcH de
'J~ernpleman
y
Bergrnan hahian entniga.–
<1o la ca,rta en su r;; últirna.s esplicfLcioncR dnidas por el "Comer–
cio . ., Segun ell o.· , el J\Iinistro no re. olveria. nad<t respecto de
la,
c1asificacion de las rnercaderias que deberiap pagar por to–
ncb<ltt11' <le peso y las (,iue se sujetarian
á
tonelada 1le
megida: