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ALMA LATINA

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tad Y estarían representados to–

dos los colores del

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reo iris. Lo

cual sería también un símbolo de

paz.

Sería justo también otorgar un

delegarlo a los señores decanos de

las Facult::icles. No nos referimos

a

los decanos catedráticos, Sino a los

alumnos que el señor Abrill llama

ria

de canos

cabellos. ( Leií se Bor–

o

a,

Tizón

y

Bueno, Alayza

y

Pé-lz

Soldán. Salinas Cossio

Seoane.

etc.) Así llevarían a la Convención

un prestigio de seriedad. Pedimos

eso

sí,

que se excl

11ya

al señor Bor–

da. Tiene la manía de mandar.

Y

. nadie se le puede oponer. Porque

entónces le manda .....·. sus padri–

nos.

Otro delegado a los <leca nos de

hecho ..... A aquellos qn e se ele–

tienen en una Facultad por ~dgún

gran amor. Amor a los cláu:-tros .

Al estudio A los catedráticos. Me .

nos por amor propio. Este desinte –

rés bien merece una delegación.

Pedimos otro delegado parn los

menores de edao . Con permiso de

usar babero en las discusiones Y

de retirarse a las

o

de la tar<iP. Pa–

ra esta delegación podría designar–

se al señor Dellarbieri.

Por último un delegado para los

candidatos Para tocios aquellos

que fracasaron en sus espectati,·as.

Después de

R

lgt1na lucha fenomenal

Pero en la sicología del candidato

cabe votar por sí mismo. En esta

elección cada uno obtendría un vo

to. Así que se procederá por sorteo.

S"ra como nn premio de consuelo.

(Sorteable entre lo!S señores Rey y

Lama. Rávago, Dávalos, Valdelo–

mar, Barredf1, Franco

y

otros). O–

tro parn los bachilleres universita–

tarios. Otro para los contentados,

a quienes no sería posib le descon –

tentar . Y por fin uno para los pe

rioclistas. Para el cual lanz ,, mi

candidatura públicamente. Hacien–

do consü1 r que, en último cRso ten.

go opción a

1

s rteo.

Con estas acertadísimas ;1.d icio

nes se evitarán por supuesto las

rlifere11cias. Y como se trata ele una

Convención todo debe ser

conven–

cional.

Otros puntos podríamos nc1arn r .

pero nos lo reservamos. Para ex –

plic.., rlos personalmente en la Con–

H'nción . L as votaciones deben ha–

cerse esta •do

los convencionales

sent a dos. Así serán mas reµosaclas .

El signo o d isti n ti vo de los con ven–

cion a les podría ser alguna insignia

Hlusiva. Optamos por el uso del

Agua de Colonia que purificará el

ambiente de la Convención. Y será

a l mismo tiempo un amable distin–

tivo.

Felicito a mi compañero de Con–

venóón señor Den egrí por su bri–

llante inici at i,·a. Y por haber en–

e ,ntrado persona d e mi talento que

la complete. . Y en virtud de m_i con–

dición de candidato me firmo:

El Señor de T G. d'Or.

Profesoras de Piano, Declamación

y

Pintura

Las señoritas Matilde

y

Carmen Casas Roca, profesoras di–

plomadas de

teoría musical, solfeo

y

piano,

y

de

declamación,

dibujo, pintura

y

flores de mano,

respectivan1ente, dan lecciones

a precios muy' módicos.

Dirigirse bajo sobre a esta Redacción.