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14

AL:\1A LATli\A

TURF

Un silencioso crujir de

frenos y

se detiene el magnifico

Rena.ul

30 HP. en que me llevara

al Hipó–

clrorn.o la caridad de un amigo ri–

co. Desciendo aturdido

y

deslum–

brado. Mi espíritu hecho

á

la

quietud inmutable del campo se

siente extraño á este bullicio. A–

rrastrado por mi culto amigo de–

saparezco entre un elegante 1non–

tón de plumas, de sedas y encajes.

Mi amigo me instruye en los se–

cretos del gran mundo: eljoven de

T .. secretario

d e una

legación,

muy elegante, mu.1 «channant»

y

la señorita de V .. en un auimado

«flirt»; aquel otro es un sport.man

distinguido; un literato notable; el

amanuense de un min~sterio, nn

joven que frecuenta la buena so–

ciedad y qué viste

á

la «derniére».

Y así voy conociendo á las más al–

tas figuras de nuestro mundo social.

El «succes» de la tarde es el

«clási co». Las el egantes están preo–

cupadas ¿Quién ganará? Van al

»

paddo k»

á

ver los caballos. Pre–

guntan á sus acompañantes y

a–

puestan. Son apuestas delicadas:

objetos de arte, «bibelots». Los

aficionados corren delirantes del

paddock donde han ido

á

recibir

las últimas noticias sobre el •esta ...

do de los caballos, á las ventan~–

llas del sport. Suben

á

las tribu–

nas para ver el «cauter» . Suena la

campana de la partida y la -emo–

ción empieza. Hay un silen_oiei hí–

pico, casi religioso.

Derrepente el formidable voce–

río con que la muchedumbre alien–

ta

á

los que ya parecen rendirse,

anuucia que se acerca el :final de

la carrera. Millarei:; de voces repi–

te.!l los nombres de los que luchan

y

los nobles brutos responden

á

los gritos con esfuerzos desespe–

rado¡::. Hay una bulla infernal. La

emoción debe ser enLrme.

Mi

a–

migo gritaba dc--sesperadamente el

nombre de su favorito (al que ·te–

nia cinco boletos del sport), y

ya

tranq uilamente con un cigarro a–

pagado entre los dedos, le tiraba

del saco pidiéndole foego, pero

¡oh crueldad! me rechazó co n fuer–

za gritándome «Fugoce».

1

ª

earrtra .

La. punta

fué

tomada

por la pupila del Carmen y la co n–

servó hasta pasar el disco seguida

á

medio cuerpo por Mose owa.

La ,egunda

de la tarde fué una

bonita victoria para el potrilla del

Oasis que alcanzó

á

Cciiderio .

...

que había tomado la pnnta

y

de~–

pués de una reñida ]ucha. lo de–

rrotó por un pescuezo.

Savon

e l

favorito á 20 cuerpos.

3

st

Cfirrera.

Sa.len en una buena

largada los tres animales juntos

y

así corren los primeros 900 me–

tros en 53. Al pasar por el P.Oste

de

1106

metros. El Veto tení.a la

punta

y

la conserva hasta pasar el

di co con un cuerpo sobre Peevish.

Muy entretenido resultó el clá–

sico E. 1\1:eiggs corrido en enarto

lugar. Alineados ios tres a11ima–

l es y dada la partida toma la pun–

ta «Fugace», Alarmista violenta

el train

y

pasa al de Galoway pa–

ra dejarse pasar despué de breve

lucha por

Oiseau M

ouche.

en la

curva Fugace después de desalo–

jar á Alarmista se acerca al fUn–

tero y entabla con él una reñida

lucha

y

lo derrota fácilmente por

medio cuerpo. El premio Febo se

lo adjudicó Pega-Pega. El placé

fné para. Babilonia. La úl-tima de

la tarde fné para la favorita- ele la

catedra Garuf;:t. El placé Riot.