q
hizo poner la Tropa de Ja guardia sobre las armas, con la preven–
cion de que no permitiesen Ja entrada sinó
á
Jos empleados en la
Comision ,
y
la de que cerrasen la puerta , si obser '.aban que el
concurso se engrosaba ;
y
entretanto saliesen quatrp Soldados, pa–
ra que con urbanidad y sin. ofender
á
nadie despejasen la Plazueia.
Que dadas estas providencias pasó
á
dar la noticia al Excelentí–
simo Sr. Capitan General , quien oída la relacion ,
le mandó que
inmediatamente pasase
á
la Real Audiencia , y Ja cerciorase de
quanto acababa de referir. Que despues
á
cosa de las doce
y
quar–
to oyó al Doétor
'Juan Vzla
,
Presbytero, que
á
cosa de las seis
y
media de Ja mañana del mismo dia catorce abrió una ventana
d~
su quarto , que mira
á
Ja citada Plazuela;
y
preguntando por
el
motivo de aquel alboroto , se le respondió
coµ
Ja historia del
~n
gido milagro ,
y
cerrando la puerta en ademan de burla ,
algun~s
de la Pla1,uela levantaron la voz,
y
dixeron :
Marrell condenado;
tan condenadoI son los Marrells
,
como el Rey
,
y
los que han sacad()
los 'Jesuítns.
Que sabia que la estatua de nuestra Señora de la
Oi~cepcion
e raba
á
mediados del mes de Diciembre inmediato del mis–
mo modo que entónces.
r
+
Sobre el concurso de gentes, aunque con
aI~una
discrepan–
cia en el juicio que formaron del número , concuerdan todos Jos
testigos que declararon haber concurrido aquel dia en . Ja cita,da.
Plazuela ;
Y.
sobre haber oído al Doélor
'Juan Vzla,
Presbítero, que.
le dixeron
:
Marre/l condenado
;
tan condenados son los Marrelis, co–
mo ei
Rey
,
y
los que han sacudo los ':Jewítas,
concuerda
'Juan Vita,
testigo
te,-cero ;
y
declara haber oído al mismo DoBor
Juan V ita .,
que le di xeroo algunas palabras ofensivas desde la citada
Plazu~J~,
.como son ,
tan condenados son -estos Mlll'Y(lJS
,
1or(lo el Rey,
y)otras
palabras ofensivas, que no tenia
E
esent¡;s.
J)
R esulta tambien que el Doétor en Medicina
Gabriel Oliver
testigo
sexto
,
declara , que el dia trece del corriente mes por Ja
tarde estubo en casa de
Ignacio Mas
,
Curtidor,
y
le dixo este, que
Gabriél
{Jeyá ,
Hornero, le habia dicho que
G_erónimo
Mas
Je dixo,
que aquella misma tarde, pasar¡do por Clelaflt,e J\e -la Iglesia dt:;l
Colegio de
M ontesion
,
había obsen·ado que la l?urísima que se ha–
lla sobre Ja pi·en a priocirat, reni·a las manos cruzadas, quando
an~·
tes le parecia que tas tenia j umas. Que oído que la Purísima tenia
las manos .cr.u2adas, respondio,
querrá decfr
{esto es.
la
Virgen Ma–
.ria )
que tengan paciená a
; y
preguntado. despues sobre Ia inteli en-
1