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Cii.1;
ad confume al
aí10 ,
y
cuyo.
p·ccjo, reciben.
los
de Chile, lo clcxan.
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pcrcebir
los Labrado.res
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puede~
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de
Trigo~
fiembr.an;
y
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que,
fino le pierden, no
fac.anla
uti·
l1dad, que las Cpíechas
d
eTrigo ks,
dexaran.
~
Rec.onozcanfe
las
partidas de Re–
gi(ho de Azucares,
y
Ropa de la Tier–
!ª'
que
[~
embarcao
en
d
Callao;
y
fe
ve.r;i
{i
a
Chile fe l.e llevan frutos)';
y
no dincrpt
Ha
gafecotejo
entre
el
yalor de aquello_s,
c.onel
de
los Trigos,
y
pernas
efrétos,
qu~
[e
d~fernbar,c;_an,
y
fr
hallara
~
que
no_ es.
un,
.tanto
po,r,
tamo
c.onmucha diferencia
el
ele los
9ue
de Reyno
a
Rcyno fe .comercian ;
y
que excede, fino en
d
todo, en la·
mayor pqrre,
lo que importan lps Tri·
gos.
Principalmente obfervefe ,
que
en
los tiempos paífados, anteriores
a
l.i
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terilidad
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y a
que
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