Playas de vidas: novelas cortas

208 Rosa Arciniega Central, M. de Merillac, manifestando haber sido él mis- mo quien había urdido y facilitado la fuga de Hermann Scheninger. "Como es lógico suponer, los jueces, en el primer mo- mento, rechazaron por increíble tal afirmación, pasando a suponer, más tarde, que se trataba de un desvarío de di- cho señor, producido por el natural abatimiento en que ha vivido estos días a causa de su responsabilidad moral en el hecho. Pero, ante sus enérgicas protestas de culpa- bilidad y, según parece, mediante las pruebas irrefutables presentadas por él, y que lo denuncian como único parti- cipante en el hecho, los jueces han procedido a detenerle, ordenando la apertura de un nuevo sumario que promete ser interesantísimo, no sólo por la calidad del personaje, sino por la gran curiosidad que despierta el conocer cuál o cuáles sean los m6rviles que han podido inducir a M. de Merillac a facilitar la fuga ·del as·esino Hermann Scheninger , · el día antes de su ejecución. "Quizá mañana mismo podamos dar a nuestos lecto- res alguna referencia concreta sobre este extraño asun- to". • • • Lo que había pasado en la prisión Pero, a pesar de esta promesaf ni al día siguiente, ni ª' otro, ni aún varios meses después, pudieron dar los pe-

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx