Una llave, un mar, un puente : el impacto de la selección de libros en la formación de lectores

25 a gustarles del todo; así como también hay algunos y algunas que llegan a dominarlo con maestría. Aunque, a medida que escribo me doy cuenta de que la metáfora del instrumento no me sirve. Porque no todo el mundo puede o quiere aprender a tocar uno. Y, si profundizo un poco más, quizás no todos/as quieren aprender a to- car un instrumento porque este no está a disposición. Y, circularmente, ahí vuelve a tener sentido la metáfora. Todo lo que tiene que ver con la lectura, con el acto consciente de leer, tiene esta dimensión dialéctica. Es un acto que te construye en la medida que lo vuelves cotidiano; y que se vuelve cotidiano en la medida que lo dominas y que se vuelve parte de ti. Construirnos como lectores y lectoras nos va construyendo como personas. Son las experiencias de lectura y cada una de las histo- rias que leemos, las que nos van constituyendo y las que pasan a ser parte de nuestra propia vida. Ingresamos en el terreno de lo dialéctico, de lo meramente humano que se va haciendo en la medida que va existiendo. Hace unos días tuvimos una reunión con el grupo de mujeres con las que una vez al mes nos juntamos a leer y a hablar acerca de lo que leemos. Pasamos dos o tres horas charlando acerca de lo que nos ocurre con deter- minado libro. Se hilvanan vivencias, cuestiones biográfi- cas, sociales, culturales. Se van entretejiendo cuestiones públicas y privadas. Vamos pensando en el impacto que

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