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Díario de
/¡ji
l.lter.stos
unos gt:anos de incienfo macho ,
y
una§·
tajas de enebro , par:\ que olienda me–
jor, fé pudieffe aplicar mas gratamente
i.lavifta,
y
al olfato.
Con ella prevendom c0menze anfto.,,
'famente la.leétura, que·defde luego
me
prefento mucho-mas delo{que mi
ima~
ginadon me havia figurado;
y
p
arecien-· do.meno era yo digno de gozar
folo.dé tantas bel\ezas,
y
precioíidádes,
deter~:
mine convocar
a
ciertos amigos aficio–
·nados
a
Libros
, con quienes en otras
qcafiones havia
partG.doefios buenos ra–
t-0s '
y
me havian ayudado
a
celebrar
juítamente los Efe.ritos , que como
d'te
lo
.merecen tanto.
El
vivir eQ un h.igar
fomamente reducido , me
facilito
mu~
Juego
elle intento,
ya
poca diligencia,
y
eiempa me halle en mi cafa con
mi
Compadre
el
Lié. Qi!iroga,
Benefidado '
en
eíl:a
Villa,
con
el
Doél,
Sagadt
,
an•
tiguo Medico en ella,
y
con el
Barber()
Mendez,
todos tres buenos amigos,
'/¡
los unicos de quien fe ·puede echar ma–
no para efios cafos en un Pais en donde
anda.
tan
tirada la racionalidad. Juntos
los