Mi Manuel

- 366 - nuada persistencia gritaban: -"¡Que lo mate Huevo duro!" ... por supuesto sin darse cuenta de quien se trataba; pero el acla- mado no respondía a los pedidos del público. . . y con razón siendo nada menos que el mismísimo doctor Sebastián Loren- te, Director del Colegio de Guadalupe a quien los muchachos tenían puesto ese apodo. Por poco no acaba a capazos la función; el público exi- gente y descontento, los muchachos muertos de risa al ver la cara larga de los profesores del plantel, befados en la persona misma de su Director ... En ·SU vida periodística cada uno había seguido la índole de ·SU carácter; pues mientras. Tassara en la "Idea Libre" com.- batía siempre en tono serio y doctrinario, por el contrario . ' Loayza en su "Fray K. B. Zón" atacaba con agudeza satíricn a los frailes y curas que tantas veces merecían sus zurriagazos. Pronto se hizo temer de ellos, poniéndolos en ridículo, pu- blicando ",sus gracias" menos que edificanteis, gozándose el pueblo en leerlo con avidez. Desde chico Alfre.do gustaba mucho de las ·visitas :de su amigo Loayza que además de su natural espíritu jovial y ale- gre, tenía el talento de ejecutar pruebas de prestidigitación, cau- sando la admiración del muchacho, pareciéndole siempre cor- tas sus visitas. Una tarde en que don Glicerio nos invitó a un paseo a la Pampa de Amancaes, allí estaba Loayza, Alfredo no se sepa- ró de él un momento. Culminó el almuerzo: retratándonos a todos en un grupo y en él están los do:s 1 amigos juntos, con igual aire satisfecho. Justamente en ·ese mismo retrato aparece al lado de Manuel, Pedro Pablo Astete zambo limeño y dueño de los "Parias" pe- riódico ocasional, quiere decir que salía cuando había reuni- do suficiente dinero para sacar un nuevo número. Era un tipo bastante original nuestro amigo "Don Pablo", como lo llamá- bamos· familiarmente en casa; casi analfabeto pues sólo la le- tra de molde sabía leer. Como el burro de la fábula: "Tocaba flauta por casualidad", sacando un periódico de ideas avan- zadas sin conocerlas, y mucho menos entenderla1s. Antiguo empleado de la casa Epner, joyero en la calle de Espaderos por los años 1875, se había hecho comisionista en vender alhajas; al desapa.recer es.a casa y conocido en plaza