La Perricholi, t. 2

L A PERRICHOLI ELVIRA.-¡ Don Manuel! l\1ANUELITO.-¡ Amor mío! 85 ELVIRA.-No puedo estar mucho tiempo ... Mima- .dre sospecha ... Tengo que valerme de mil estratagemas - para venir a hablar con vos. - _ 1\!IANUELITO.-¿ Me amáis? ELVIRA.-¡ Y me lo preguntáis~ ¿Por qué vengo a la ventana, sufriendo tanta angustia en el temor de ser descubierta por mi madre? MANUELITO.-¡ Mi bien! ¡Mi vida!... ELVIRA.-¿ Por qué no habláis con mi madre, me- jor? MANUELITO.-Sí, ángel mío. Es n1i deseo ardien• te; pero antes es necesario ·que conquiste a mi madre. .Da- me tus manos. ELVIRA.-¡No... no... no debo! MANUELITO.-¿ No vas a ser mi esposa? Ade- más, un beso en la mano es hornenaje respetuoso. Dáme- la... No me la nfegues ... No te retires ... ELVIRA.-No debo... MANUELITO.-No me atormentes ... Concédeme esa merced ... ¡Por nuestro amor! ELVIRA.-¡ Por nuestro amor!. .. Tomadlas ... MANUELITO.-Eres un ángel. <BESOS>. MANUELITO.-¡ Acércate más!. .. ¡Qué contemple tu lindo rostro! ¡Ven.... ven ... más cerquita! ELVIRA (Suspira).-Juradme que me amáis... que 110 me olvidaréis nunca ... Que me haréis vuestra esposa. MANUELITO.-Sí: t .e juro, mi cielo; todo, todo lo que quieras, te lo juro, porque sólo vivo para adorarte. ELVIRA.-Os amo tanto, tanto, que · si me olvida- ráis, .me moriría de pena, y me dicen muchas cosas de vos. lVIANUELITO.-¿ Qué te dicen de mí? ELVIRA.-Que dáis serenatas por otros lados ... MANUELITO.-Mienten los malandrines que tal dicen. Mis cantos son sólo para tí.