La Perricholi, t. 2

66 MAR 1 A ALVARADO RIVERi todiado por cuatro soldados seis leguas más. Allí que- daréis libre y podéis llevar vuestras maletas que vienep aquí en la c~rroza. Y no lo olvidéis: si queréis conser- var vuestra vida, no regreséis a Barcelona. Quedád con Dios. MANUELITO.-Que él os guarde. (SIGUE LA CARROZA>. MANUELITO.-El diablo me lleve si entiendo jo· ta de todo esto... VOZ LEJANA DEL CAPITAN BAUSA.-"Por asegurar herencias y aumentar el matrimonio, las fami- lias nobles no reparan en los rnedios que las lleven al lo- gro de sus ambiciones". MANUELITO.-Me parece oír su voz... Sería la única explicación. JORNADA VEINTE LOCUTOR: Rojos y blancos claveles, rosas, alelíes, azahares, jazmines, ñorbos, margaritas, violetas, pensamientos, abren sus corolas de variados matices entre el verdor de las hojas. Campanillas , madreselvas y granadillas, te- jen espesias cortinas en las glorietas y galerías, y el aire perfumado deliciosamente. vibra con los frinos de los ca- narios y los ruiseñores, en un himno jubiloso. (DISCO DE PAJAaos>. MICAELA.-¿ De dónde vienes Mónica? MONICA.-De1 jardín, mi amita. Fuí a cortar mas flores. Ved. MICAELA.-¡ Qué lindas! Dame los candelabros de plata.