La Perricholi, t. 2

L A PERRICliOLI 225 TOMASITA.-Porque son muy tramposos, abueli- ta. Y o no juego más. Me voy con su Merced. 11ICAELA.-Bueno; bueno ... Muy contenta de que prefieras la abuelita a los diablillos de los hermanos; Va-1 mos a sentarnos a ese banco. TOMASITA.-A ese otro, abuelita, que está bajo el rosal. Mirad qué lindo. NIÑO 1 Q.-Yo también, abuelita, me voy con su Merced. NIÑO 2Q.-Yo también, abuelita. NIÑO 3Q.-Dadme asiento a vuestro lado, abuelita. MICAELA (Gozosa).-Para tódos hay lugar en mi corazón y en el banco~ TOMASITA.-Ahora, abuelita, un cuento. NIÑO 1 Q.-Un cuento ele esos tan bonitos que sa• béis. MICAELA.-¿ Queréis que os cuente cómo se inven- tó el juego en que estabáis entretenidos hace un momen- to? TOMASITA.-¿Hay huevos? -A la otra esquina por ellos. MICAELA.-Sí: el juego "A la otra esquina por ellos". , ro... NIÑO 1 !).-Contad, abuelita. ¿Quién lo i,nventó? MICAELA.-Escuchad: había un Virrey muy ava- <SE VA ESCUCHANDO LA VOZ MAS LEJANA>. \.. .· ..... ·· .. . * * * <PASOS). MANUELITO.~¡ Ve, Margarita, la abuelita rodea- da de toda la bandada! MARGARITA.-No molestéis a la abuelita. Ve- nid conmigo. MICAELA.-No; no me molestan ... Son un encan•

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx