La Perricholi, t. 2

no MARI A J . RIVERA la borrada,. no por Ímposición de mi madre, sino porque no quiero ya frecuentar esas casas: soy otro hombre. T AGLE.-Está loco, y le ha dado por eso. (A Ma- nuel). Bueno, amigo, tengo gusto de que seas otro; así tendrás doble felicidad, porque gozarás por dos. ¡Feliz mortal! MANUELITO.-Ya sé que estás pensando que he perdido el seso; pero no, amigo, nunca he estado más cuerdo que ahora. T AGLE.-Así dicen todos los locos. MANUELITO.-Te hablo en serio; estoy prenda- do de un ángel, y quiero hacerme digno de él... T AGLE.-¿ Amas a un tercer ángel, ahora? MANUELITO.-No, sólo amo a un ángel. TAGLE.-¿ Y Margarita, y Elivirita, las derribaste ya de tu altar? _ · MANUELITO.-Sí, no amo sino a_... T AGLE.-¿ A quién? ¿Qué nombre tiene tu tercer ángel? , MANUELITO.-Se llama Marianita. T AGLE.-¿ En qué cielo vive tu ángel? MANUELITO.-Escucha. * * * LOCUTOR: J\1icaela está preocupada por un grave problema que le ayuda a resolver Manuelito. (DISCO DE PAJAROS). MICAELA.-Estás desganado, hijo, y vas perdien- do el color. Toma tamal ; está muy rico con pichón: lo preparó Juliana especialmente para tí. ECHARRI.-Un vaso de chicha de jora, te abrirá e-1 apetito. (Sirve).

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