La música de las bibliotecas: política y poética de un espacio público, hoy
153 de que reflejan profundos cambios en la fisiología del cerebro, y quizás incluso en su estructura 32 . Me encanta que ese hombre tan sabio y ese científico tan agudo se permita decir: «No sabría decir exactamente cómo… pero he constatado». A mi manera yo lo imito. No sabría decir exactamente cómo, pero me parece que descubrir que hay otras inte- ligencias y lenguajes, y que las fronteras entre los reinos y los seres se han revelado como ficciones, algo nos debe decir a los que queremos apostar por esos espacios consa- grados al conocimiento y el saber. ¿Podemos proyectar nuestro ser de otra manera? Asumirse superiores supone privilegiar una perspectiva vertical. Arriba está la cabeza, territorio del cerebro. Él, que piensa, rige todo. ¿Podemos asumir una perspectiva horizontal y reticular? ¿Abrirnos a un tiempo y un hacer que suponen reconocer la pausa y lo oculto? Concentrarse no es lo mismo que atender. Desde cierta perspectiva, incluso son opuestos. Desde esa perspectiva, la atención, como escuchar, tiene un valor fundacional. 32 Tomado de «Por qué necesitamos jardines» en Todo en su sitio. Primeros amores y últimos escritos , de Oliver Sacks. Barcelona: Anagrama, 2020, p. 269-270.
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