La Biblioteca Imaginada - Jardín para sembrar comunidades
55 en el mundo es el caso de La Grainothèque (Bibliote- ca de Semillas), en Costa de Marfil: la sala de lectura de la Biblioteca Pública de Irobo tiene un área con li- bros y semillas. Allí existen tres tipos de granos: flores, verduras y plantas de condimentos, además de libros y documentación necesaria con técnicas de reproducción de esas semillas. En 2017, se «prestaron» más de dos toneladas de granos, las que fueron devueltas en 2018 a la biblioteca. Además, este lugar se ha convertido en un espacio de intercambio de semillas, en una «zona de trueque: tomo = doy». En Librerías y oportunidades económicas , una investi- gación realizada por el Urban Libraries Council ULC, una asociación de grandes bibliotecas metropolitanas de Estados Unidos, se destacan cuatro áreas en las que las bibliotecas públicas y los gobiernos locales están traba- jando para mejorar el desarrollo económico local. Primero, los servicios de alfabetización y educación infantil que se ofrecen en las bibliotecas contribuyen al éxito económico a largo plazo. Según la ULC, «estos servicios son el primer eslabón en una cadena de inver- siones necesarias para construir una fuerza laboral edu- cada que garantice la competitividad local en la econo- mía del conocimiento» (2008, p. 21). En las últimas dé- cadas, las bibliotecas públicas han ampliado su alcance y ahora brindan servicios especialmente dedicados a la
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