El Heraldo masonico
EL HERALDO MASOHICOª ----- ~~-0-~l.__ _;:;;;;;;;._mi.ii.;; .. ;....;o~:~;~;_~:1>~-~:.. ~~::rt :~~~~~~1---•~,:::~ el mornonlo supremo no ha llegnu->; y eomo por todos los úngu los de la tierra .ipar0, e pura y ra– diante laesll'f}lla tl o la lillcrlnd, ellus emplean In fuerzn, la cocrsion y otros 111cd¡os no mny lri – dalg-os rara 10ncr siempre !)iljo s11 do:ninacion– ,il g<-nero humano , qne largo !Ícmpo han opri- EL IlEUALDO. C.\LL.\O, t, DE 1\ OlllL DE 1862. ~~.eQ~ W:-.J~~~-;r~~~~ LA AMÉRICA. Temerosos <le que tnl yez se nos i ncrcpc por algunos tic que mezclnrnos en nuestra puhli– cacion objetos que noalai)en {1 !a_masonel'ía, va– mos sin einuargo a consigna!' un peque11o artí– culo ü In causa arn crican,,, pl'ol>ando al mismo tiempo que l:1 masonería C'.omo instiludon csr n– <:ialmcntc liberal, tl chc ded ira rse u dcfondel' la w umTAn, sen n políti cos 6 rcli3iosos los mee.l íos que se emplN•n para ma laria. Ln Amr rirn amenazado en sus insliluciones: la América próxi ma {1 perder su autonomia con– quisltida <·on rios <l e sangre y millarC's de vídi– mas, vuelve á excitar la ambidon de los poten– tados europeos, y lendra que su<:t1mbir si los hombres de roruzon, es cl eri l' los masones c¡ue 1100 los ccn linelas avanzados do la cidl izacion y de In li bertud uni\'ersnl, uo se aunan y <:oo trihu– yen COll ~ll i11 íl 110nd:i, SUS COllpl'ÍlllÍCnlos y Stl valor,~ con tener el <lcsborchimien to de las pa– siones, único 11gcn te quo arnc\'C en Europa a los reyes parn sofocar el foco de 1(1s liherlades polí– t íc:as y sociales que de la A mfri( ¡_1 vuelan h(lcia el viejo contincnlc pam hacer de todos los hom– bres una sola familia. m lrulH1jo de tantvs tifios; las innomorahles faligns y la perscvernnc:ia 0m– ploadas en haC'er c.lel hombre 1111 ser digno, rom– pi<mdo las c-ndenas que la rs<·lavitud y el oscu– rantismo había n preparado, seri,rn estériles, y los de.l'cchos del hombre tornarían~ sumirse en el nbismo, convirtiéndoscle en cosa , corno en la úpora del feudalismo. Cuando los ¡mcblos y los hombres lian sabo– reado el fr11to de sus inslituc·iones propias; ruun– do el corazon se hn robustc(•,ido con In ignal– dad; cunndo Id república se ha arraigado e,, una sociedad, allnmonte ofcnsi\'o parece que los ilustrados gobiernos dol ,\nliguo mundo, sin re– pnrar que la forma republica na <'S la mas confor– me a la eslrucLur a y orígen del hombre, c¡uioran hollar hastn las leyes de In naturale;rn , por sos– tener sobre sus sicnC's las diademas que la t'(J11al– dad parece nrrebutarles; porque el siglo de! va– por, dol telrgrnfo, rrn reconoce otros privilegios qnc el sabel' y la virtud. Pero el <lcspo1ismo , que aun tiene sus sectarios, no quiero ver raer de una en una las llores nrn rchiLas que se sostie– nen toda vía sobre _el trono de los reyes , porque • 1 m11,o. P.:ira realiza r sns pro~ e<"los cuentan co1<1 el apoyo de los fanalicos y u!lral!lontanos, en cu– vo sostenirn ien to invicrlcn las rentas J o los es– iados que dominan, C'on perjuicio Jo los in1c1·e– scs romunalcs, que :mfrrn )¡_is c-onscrnencias del lujo y el dcspilfon•o. De ahí ,·icnc que el pueblo sufre hambre, en niu ..h0s países e.le Eurnpa y se YO obligado,\ c;nigrar del sueldo nat ,il para l>us– rnr su s ul>sistenc-ia en el ex trul1o: de ahi viene tamhien qu e ese mismo pueblocans,,do del fuer– te trabajo improdut.li vo , a('epta la innoble mi– sion del (ilibuslcro parn prnpornion;11 se en A mtc. rita medios faeiles de sostener su Yida. Así es que los gobiernos europeos danín ocnpaeion a sos hombres trayendo a países libres la uomi – nn <·io n bastu rda do royesnelos, qu~ no pro!'esn n el i<..l1oma, la religion ni conoce11 sus uccesrda– drs. La Amé rica conr.lnid1 con sus ren tas pura sos– tener al rey y su 11umeros,1co rte, resu ltando de la nueva formi de gobierno la bancarnta v ani– c1uilamiento ele las· riq11czas fnericonas; y esto .iparfe del l'elroccso de lus ideas c:ivilizadoras,de losprinr.ipios el e li berlad y e.le la r<>genera<:ioo de la espcc·ic humana , obra encomendada a los ma– sones, y por la cual debcl'ian l11eba r inccs~rnte– menlc para corresponder al objeto do la inl'titn– cion. La opresion cle lél .\ mérica,no <'Ssolamenle una guerra crnen ta y de exterminio para el hombl'e~ es algo mas, In violario11 de las leyes naturales y el asesinato de la idea; es lu 11111crtc de lo mas g rnndc y sublime ql!e pudo dcsarrnllal' el hom. bre con l,1 :i\'uda ele la dviliza<:ion; es dec:ir lit Lllml\T,\l). ¿Qc16 ser:1 de la Amcrica Jominada por el c.lespotb mo? Y los mill ones de europeos de co– razon libera l ¿dónd:'se refugiaran paro propa– g,}r sus nobles doctrinas? Extendida la monar– íJUÍél por todo el mundo ¿no debemos esperar con .i ustid .i c¡11c el imperio de la loy desn parc:1.– <·,1? La Am6rica con sus insliluc·iones libera les v cle.mo <: d1ti eas es la n11e sostiene el equi librio so·– cial y político del gi'ulio y lo que i11<:linD ü los Poyes a Ycr en los domas hombl'es, lo que son en sf, ~• no unas maq11i1:as manoj.il >lcs eon el ~a rrote á quien hun dado el nombre de cetro. ¿Y los masones que hacen en ,isla de los hechos
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