Boletín de la Biblioteca Nacional N° 85 - 86

Las secciones más importantes contenidas en los primeros números fueron: Libros y folletos de recientc aparición; Registro de la propiedad intelectual; Lis– tas de publicaciones periódicas nuevas, y Legislación referente a la Biblioteca Na– cional y a la Escuela Nacional de Bibliotecarios. Además, en sucesivas entregas se fue registrando el inventario de todo el material clasificado, recuperado des– pués del siniestro. En 1948, el Dr. Basadre dejó la Dirección de la Biblioteca Nacional para ha– cerse cargo de la Dirección de Asuntos Culturales de la Organización de los Esta– ctos Americanos con sede en Washington. A raíz de su renuncia es nombrado en su lugar el Ing. Cristóbal de Losada y Puga (1894-1961). Matemático e inge– niero de minas, catedrático y autor de numerosas publicaciones científicas, ejer– ció la dirección del boletín a partir del número 11. En este período se inició la publicación de una serie de compilaciones y tra– bajos de investigación preparados por funcionarios de la institución. Así, cn en– tregas parciales, Jorge Moreno Flores se hizo presente con sus "Apuntes para una iconografía peruana"; Raúl Rivera Serna inició en el N'? 12 el "Indice de manuscritos existentes en la Biblioteca Nacional", y Lucila Valderrama, por su parte, presentó el "Catálogo de mapas antiguos de América". El Departamento de Publicaciones Oficiales contribuyó a la difusión biblio– gráfica peruana con la publicación de las Memorias de Ministros de Estado del Perú y de otras autoridades políticas. El Departamento de Catalogación y Clasificación inició la publicación del Re– gistro de Autores del Catálogo Peruano (N'? 16) con la finalidad de proporcionar a los bibliotecarios una fuente de consulta básica para su tarea profesional. A partir de 1950, el Departamento de Consulta y Lectura empezó a llevar un registro de las conferencias y exposiciones que se realizaban en Lima; éstos también se incluyen en números consecutivos. Durante estos años el Bolctín fue, según expresión del Dr. Basadre, un "pun– tual y modesto registro de nuestro paulatino renacimiento y desarrollo ... ". El R. P. RuMn Vargas Ugarte (1886-1975) fue dcsignado Director a raíz del fallecimiento del Ing. Losada. Historiador, infatigable investigador de la época virreynal y profundo conocedor de los repositorios documentales de Europa y América, el P. Vargas Ugarte tuvo una breve estadía al frente de la Biblioteca Nacional. En ese lapso se publicaron dos números del Boletín. En la edición del N'? 22 se produjo una situación particularmente interesante que nos obliga a detenernos brevemente: Durante la elaboración del presente trabajo, hallamos unos ejemplares cuyo primer artículo l'ecoge, bajo el título de "Algunos datos para la historia de ]a Biblioteca Nacional", tres documen– tos hallados por el P. Vargas Ugarte que representan "el lado sombrío" de la Biblioteca a la que se critica duramente, lo mismo que a su Director, don Ri– cardo Palma y a un bibliotecario. 8