Table of Contents Table of Contents
Previous Page  24 / 298 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 24 / 298 Next Page
Page Background

16

MEMORIA

DEL

DlREC'l'Oll

·compatriotas,

y

en que,

á

pesar de las calamidades de la guerra

y

de la

cadena de infortunios individuales que fueron su desastrosa consecuen–

cia, aún quedaba vitalidad en el pueblo pernano. Pudimos ser vencidos

en los campos de batalla; pero la espada clel vencedor no alcanzó á he–

rirnos en el cerebro. Nuestra Universidad, nuestros centros todos de

ilustración, que el mal inspirado general euemigo creyó dejar para siem–

pre aniquilados, hán vuelto, en pocos meses,

á

la vida, y acaso con mas

elementos de progreso que los que, en hora infausta, nos arrebatara h.

belicosa locura de un soldado.

Bibliotecario-mendigo, toqué á todas las puertas, y no encontré

p1:lru1mo, dígolo con patriotica satisfacción, que me negara su concurso.

La

relación nominal

y

numérica que figura entre los anexos

ele

esta Me–

moria, manifiesta el entusiasmo público en favor del establecimiento.

Baste decir, qne

un

solo caballero, el señor don Juan

J

osú Moreyra, hi–

zo el donativo de dos mil volúmenes,

y

que abundaron los obsequios do

cien

y

doscientos tomos.

.

Debb una palabra de reconocimiento

á

todos

y

á

cada nno de los

sefiores, que, teniendo

fé,

si nó en mi competencia, al ménos en mi con–

sagracion

y

honorabilidad, se apresuraron

á

prestarme generoso

y

deci–

diclo apoyo.

Sin ese concurso, de todos

y

de cada uno, mi empeño

y

asiduidad habrían siclo estériles ó dado escasísimo fruto. Nó

!

No debo

aclueíiarnie de honoró merecimiento que no es exclusivamente mio. Yo

he sido sólo un obrero de buen¡¡, voluntad. El renacimiento de la

Bi–

blioteca

hn,

sido labor común. Pertenece

á

todos y

á

cada uno de

:o,,

qtw,

con sus donativos de libros, con su dinero, con sus influencias, han

cooperado. Es labor de la prensa de Lima,

y

principalmente dal decano

"Comercio,,, cuya propaganda en pró de la Biblioteca

fué

tenaz: labor,

en fin, del progresista jefe del Estado General Iglesias, de sus Minis–

tros de Instrncción señores Barinaga

y

Castro Zaldívar,

y

de su Mi–

nistro de Hacicnua señor Galup, siempre benévolos para con el Biblio–

tecario y siempre complacientes para atender sus exigencias.

Puse al servicio de la patria lo poco que de actividad, de inteligen·

cia

y

de entusiasmo plugo· á Dios conservar alh1 en mi espíritu: sé que,

en la milicia de la vida,, no son laureles todo lo que se cosecha, que

LO

hay campo sin abrojos

y

espinas, y que acaso no faltará quien sostenga

que, en ocho meses, era hacedero el organizar

ID('jm

la Biblioteca. Yo

no hé podido mas, ingenuamente lo confieso. Pero, por poco que haya

realizado, la base del edificio me corresponde. Otro la mejorará. Entre

tanto, es

~

Supremo Gobierno, es

á

la prensa, es al país

á

quienes com–

pete decidir si, habiendo tenido que crear

é

improvisarlo todo, ha sabi–

do

6

no corresponder á

la

confianza que en él depositaron el Bibliote–

cario que esta Mellloria suscribe.

i],icardo

~alma.

' Lima, Julio

28

de

1884:.