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el pn,go por tonehulas de met1ida; a sí pues, aJ pedir
e~tc
úl–
timo,
110
lrnn
h echo
nrn. _
que p edir en c1os capítulos una sola
é
idéntiua co::;a-acla.1·acion <1e h1is bases-un;1 ac]aracion com–
pleta, como ·e qniero en todas 1a8 leyes que han de tener una
apliua,oion
cuotjdic.ma, Lj_Ue
ver~an
.·olJl'e mjllone. <1o soles y
que deben ser perfectamente corn prc}l(1idas por los
ciuda.da–
nos para su cumplimiento, y por los jueces y tribunales para
su r ectr1i apliuacion. El Gobierno mi smo qne vá á celebrar el
contrato, está c.·pecialmente il1teresado eu pr eci.·ar con la
de–
bida op01·tt1ni<.1a<1, l os térm inof:
do
m1
compromiso en que no
obliga sus bienes pen;orrnlc: sino los <le innumerables compa-·
triotas suy oB <-iue le hiciernn gr an <1epm:iitario de su confianza.
P edir acbnwiones
e»
pedir luz, y esta solo pueden negar–
la los c1éspotas
y
ustupadore , únicos amigos de 1as tinieblas.
El comercio del Callao no pide en suma mas que aclarn,cio–
nes
á
las bases: acla1·aciones
á
]as bases por medio de una
nueva i· edaccion y urrn tarifa; a,claracion es
á
las bases, deter–
minando la fecha.
ó
las condicione· de la obra,
p ~tra
qu e se
haga exequibl e el impne1' to retributivo: aclaraciones de las
b ase. definiendo la condicionen qu e quedarán los propieta–
rios de baradero.
y
muelles particulares. No pidiendo
mas
que luz, no cabe duda en que e.'ta les erá concedida. Esta
concesion la contamos como otrn paso progr esi' o; porque Ri
las aclaraciones fues en justas
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eqnitati va. , allí terminará la
dis cus ion sobre ese punto, como ha terminado la que versaba
sobre el impuesto inconstitucional, y sino fues en satisfacto–
rias , se contrae1·án las ulteriores obs ervacione.
á
los puntos
de la djsidencia, y iompre caminaremos por ese lado acer–
cándonos al aciel'to.
Nosotros por nuestra pa.1·te deman<1amos tambicn aclara–
cion es sobre otrns puntos de este 1111.·mo proyecto que el pú–
blico no conoce, porque no se les han mostrado sino
á
media
lnz
6
por relumbrones.
L a
e.-tirpacion <lel con trnbando, las
comodidades que se ofncen á _los buque.· para ca.rga.r
y
des–
cargar, el cómputo de las estadía.s etc., son co.
a.
que están
por aclararse.
Los empresarios han dicho, do s comi iones de la
H.
Oama–
ra
de Diputados han repetido, y algunos defensores de la em·
presa han
vuel~o
á
repetir, qu
con l muelle, la
dársena,
el
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